Cuidado con Carlos Mario: ya dilapidó las finanzas del Ayuntamiento; ahora va por la de sus empleados


Era una esperanza para los chetumaleños hace apenas un año. Pero ahora sus trabajadores le temen. Es Carlos Mario, el presidente municipal de Otón P. Blanco. El temor está bien fundado, ya se gastó el dinero del Ayuntamiento y ahora se está gastando el sueldo de los trabajadores de la Comuna.

Por: Esmaragdo Camaz

En menos de un año, Carlos Mario Villanueva Tenorio dilapidó las finanzas del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, se gastó cerca de 100 millones de pesos en cuentas o cuentos, de supuestos empleados recién contratados, supuestos asesores y una serie de onerosos desembolsos que no hay forma de comprobar, según la denuncia de los propios regidores.


Pero eso no es lo peor, pues ahora y resultado de este gasto desordenado de Carlos Mario, los empleados del Ayuntamiento –los que menos tienen-, ya perdieron a partir de esta fecha más de la mitad de su salario.

Dinero que servirá para que el munícipe siga gastando.


Los detalles de las compensaciones canceladas respecto al número de empleados, su nivel en el escalafón y el monto total del dinero de los trabajadores que ahora se va a embolsar Carlos Mario es un secreto.

Pero hay unos datos.

Muchos trabajadores de confianza que se sienten en el desamparo al no pertenecer a ninguna central obrera que los defienda, ganan 2 mil 400 pesos al mes.


Estos empleados venían percibiendo una compensación de 3 mil pesos, dinero que les alcanzaba para medio completar su salario. Pero ahora estos empleados tendrán que ceder el dinero que les servía para comer y para las escuelas de sus hijos, eso para que Carlos Mario siga gastando.

El caso es que el munícipe no piensa quedarse con las bolsas vacías.


Estos trabajadores, los que menos ganan en la Comuna, advierten que el recorte de las compensaciones no es parejo, pues algunos empleados, también de confianza, se llevan hasta 50 mil pesos mensuales con esta prestación.

Aunque todavía persiste la duda respecto a estos supuestos trabajadores, pues como ya lo descubrieron hace unos días los regidores, muchos de ellos son aviadores. Mención a parte la incertidumbre que prevalece al interior del Ayuntamiento, pues ya no se sabe quiénes son “aviadores” o “fantasmas”, es decir, empleados ficticios.


El regidor Rivelino Valdivia ha advertido que el recorte de las compensaciones tiene que ser parejo, lo es un reclamo justificado, aunque este concejal y el resto de sus compañeros en el Cabildo no han planteado cómo hacerle para amarrarle las manos al alcalde gastalón.

Se sabe que este recorte de las compensaciones le produce a Carlos Mario, unos 3 millones de pesos mensuales. Dinero más que suficiente para solventar sus gastos, que son muchos.


Pero se sabe que va por más, pues en unos ochos meses que le quedan para manejar el dinero del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, podría obtener hasta unos 8 millones de pesos mensuales si recorta todas las compensaciones, junto con los recortes de personal que se saben, están en puerta.

El plan de Carlos Mario es levantar unos 100 millones de pesos antes de dejar la presidencia municipal y entre los trabajadores del Ayuntamiento es se ha traducido ya como una serie alerta de que, si no se ponen listos, el alcalde los va a dejar “chiflando en la loma”.


El proyecto que inició como la llegada de un personaje que revindicaría la clase política del Sur del estado y la reivindicación del nombre de su padre en prisión, ha resultado en una especie de peligro público que llaman Carlos Mario, así, sin el apellido.

Hoy para los trabajadores del Ayuntamiento la defensa de su salario es su prioridad. Sienten que si Carlos Mario se gastó el dinero, no deben ser ellos los que paguen el dispendio del alcalde.
Publicar un comentario

Comentarios