Registra PGJE hasta seis denuncias diarias de violencia contra mujeres; QR ocupa sexto lugar nacional

Chetumal.- La Procuraduría General de Justicia registra diariamente -tan sólo en la zona centro y sur del estado-, de 6 a 8 denuncias por delitos contra la mujer, de las cuales la mayoría son por violencia física, y una mínima parte, por abuso sexual, colocando a Quintana Roo en el lugar 6 a nivel nacional por el alto índice de violencia contra las féminas, así lo afirmó, Rebeca Beatriz Herreros Tapia, directora del Centro de Atención a Víctimas del Delito.

Las estadistas revelan que tan sólo en el mes de Enero se registraron, 150 denuncias, en donde el 90 por ciento fueron por violencia familiar de manera física hacia la mujer, mientras que el 20 por ciento restantes hacia menores de edad, y también a hombres, pero en menor frecuencia.

“Lo que más nos llega son las mujeres víctimas de violencia y de maltrato, así como mujeres que han sufrido de una de violación o abuso sexual,  tanto mujeres  adultas  como jóvenes mayores de edad, pero también niños, desafortunadamente somos uno de los estado con mayor índice de violencia hacia las mujeres, la verdad que la palabra de erradicar la violencia ojalá se lograra, pero no, en cuanto a denuncias generalmente se inician al día un promedio de seis o más”.

Aclaró que el Centro de Atención a Víctimas del Delito no sólo brinda atención a mujeres que sufren de algún tipo de violencia, ya sea física, verbal o sexual, también casos de hombres que son maltratados por sus parejas o menores víctimas de algún delito.

Sin embargo, no hay género ni edad para la afectación física y psicológica que dejan los agresores, hacia las personas víctimas de estos delitos.

La funcionaria de la Procuraduría General de Justicia también reconoció la necesidad de intensificar las acciones para concientizar en promover y reforzar la cultura de la denuncia en las mujeres y también en los hombres, sobre todo en las comunidades rurales de la zona maya de Quintana Roo, donde se desconoce la información de programas de atención a mujeres víctimas de violencia, aunque también en las zonas urbanas otro de los problemas que impide sancionar a los agresores, es la continuación de las denuncias.

“Así como llegan mujeres asustadas a denunciar, llegan al otro día a desistir y decir que ya no, dejan sus procesos a medias por el miedo y amenazas, por eso lo dejan, ya no llevan a su testigos, no van a su examen victimológico y esto impide que se continúe con el proceso”.

Las amenazas principalmente de los hombres a las mujeres es que les van quitar a sus hijos o que les van a dejar de dar dinero si continúan con la demanda, provocando que desistan de la misma.