Mujeres quintanarroenses producen artesanalmente productos nutritivos del árbol “Ramón”, pero requieren apoyo gubernamental para masificar derivados

Chetumal.- Un grupo de mujeres de la comunidad sureña de “Tres Garantías”, está produciendo una extensa variedad de productos alimenticios a base del fruto del árbol autóctono conocido como “Ramón”, tales como, galletas, pasteles, tamales, conservas, tortillas, horchatas y hasta ceviche, aunque por falta de apoyo de la Secretaría de Economía, la producción no ha podido ser masificada, así lo dio a conocer, la empresaria Victoria Gómez, del grupo de “Mujeres Selva Vida”.

Dijo que hace algunos años están produciendo estos derivados, pero todavía de forma artesanal, vendiéndolos en las calles debido a que no han recibido apoyo por parte de la Secretaría de Economía a cargo de Javier Díaz Carvajal.

“Ahorita hemos tenido que empezar a buscar mercados, nos han hechos algunos pequeños pedidos porque carecemos de horno y de infraestructura, recorremos las calles, restaurantes y lugares donde venden café, ofreciendo nuestros productos, pero no hemos entregado nada todavía, somos puras mujeres y desde hace tres años llevando luchando para salir adelante y no hemos tenido apoyos”.

El grupo de 10 mujeres empresarias de la comunidad de “Tres Garantías”, explicaron que los productos hechos con el fruto del Ramón aportan gran variedad de nutrientes y beneficios de salud para los consumidores, sin embargo, la falta de apoyos para el crecimiento y comercialización para esta empresas, al igual que muchas que ofrecen productos locales, no les ha permitido ampliar su mercado, que está limitado a la propia comunidad.

Destacaron que la idea de aprovechar este fruto surgió luego del autoconsumo constantes y las complicaciones económicas en cada familia, ante la falta de empleo.

“Solicitamos un apoyo económico, hay esperanzadas, pero seguimos esperando, nosotros hemos consumido el fruto y nuestras familias, sobre todo porque tiene muchas propiedades y vitaminas, de todo tiene y es muy nutritivo, por ejemplo, con el Ramón seco se hacen varios platillos alimenticios, y con el Ramón seco se procesa la harina para hacer panes, galletas, pasteles, aguas frescas e infinidad de productos que se hacen con este fruto de la región que no ha sido aprovechado”.

Victoria Gómez refirió que la situación económica que se vive en la entidad y  la pobreza extrema que hay en las comunidades rurales orilló a este grupo de mujeres a emprender un negocio con recursos naturales de la región, sin embargo, se han topado con la limitación de crecer por la falta de apoyo de las autoridades.

Finalmente, dieron a conocer que actualmente sólo cuentan con un terreno sin infraestructura y un pequeño horno casero, aunque su proyecto es consolidar una panadería y tiendas para la venta de sus productos.