Factor Borge: Posicionó a Carlos Joaquín en campaña pero hoy le cobra la factura (Columna “El Expediente”)


Por: Esmaragdo Camaz 

El factor Borge fue definitivo en el triunfo de Carlos Joaquín, pero ahora ese mismo factor le está cobrando la factura.  

En sus primeros dos meses como gobernador, Carlos Joaquín no ha logrado llevar a Roberto Borge ante la Justicia y el público que votó por él empieza a desesperar.

Carlos Joaquín escogió el caso más débil de las tropelías de Roberto Borge para denunciarlo ante la PGR. El gobernador pretende venderle a la Procuraduría General de la República una falta administrativa convertida forzadamente en un delito penal.

Los asesores de Carlos Joaquín -entre ellos Rafael del Pozo-, consideran que hay asociación delictuosa en el remate de predios de la reserva territorial a familiares y amigos. Y esto puede ser cierto, pero ahora corresponde al gobierno de Quintana Roo aportarle suficientes pruebas documentales al ministerio público federal para que éste pueda consignar el caso, cosa que hasta ahora no ha sucedido.

Pero, ¿Porqué escogió Carlos Joaquín el caso más débil? -Esa es la pregunta. Existen otros casos mucho mejores para llevar a Roberto Borge a juicio. Veamos.

Las tropelías de Roberto Borge cometidas en la aerolínea paraestatal VIP-SAESA son monumentales. Apenas en los primeros días de su gobierno, el Congreso de Quintana Roo ya tenía documentado el millonario fraude cometido por el ex gobernador que pagaba 181 millones de pesos anuales por la renta de aeronaves a una empresa establecida en Veracruz. Borge pagó un global de 40 millones de dólares por este rubro, aún cuando el gobierno de Quintana Roo cuanta con su propia flota de aeronaves.

El caso VIP-SAESA es un claro fraude a las finanzas públicas del estado y seguro no habría sido difícil convertirla en una denuncia penal exitosa, más aún partiendo de que el Congreso tiene la prueba documental a partir del férreo interrogatorio al que fue sometido Carlos Alberto Acosta, el encargado de la paraestatal aérea.

Vamos con AUGAKAN. La empresa francesa que opera los servicios de drenaje y agua potable en Cancún le pagó al gobierno de Borge mil ochenta millones de pesos para extenderle la concesión en Benito Juárez, Solidaridad, Isla Mujeres y sus zonas de influencia.

El Congreso de Quintana Roo hizo comparecer al director de la entidad rectora del agua -CAPA-, Gustavo Guerrero Ortiz, quien fue muy claro al afirmar que los mil 80 millones de pesos que pagó AGUAKAN por la extensión de la concesión no ingresaron a las arcas públicas. El fraude cometido al estado es muy claro y éste caso también sería una denuncia penal muy consistente ante la Justicia.

Y qué decir también del monumental saqueo de 22 mil millones de pesos que el propio Carlos Joaquín viene pregonando desde su campaña electoral. Este desfalco es fraude, peculado, malversación y los que resulten, todos ellos delitos que ya tienen en la cárcel a otros gobernadores, algunos de ellos hoy todavía en fuga.

Carlos Joaquín dijo el lunes en la ciudad de México al término de un evento partidista del PRD, que en los siguientes días habrán más denuncias contra Roberto Borge. No dio detalles pero adelantó que serían del tema relacionado a la entrega de concesiones de taxis, camiones de carga y notarías públicas.

No sobra decir que éstas últimas tres citas podrían ser también faltas administrativas y no delitos penales. Habrá que esperar que estas denuncias sean interpuestas y conocer los detalles de las mismas. Por cierto que hasta la fecha se desconoce el número de averiguación previa y los pormenores de la demanda que la PGR dio entrada contra Roberto Borge.

En México y no sólo en Quintana Roo, la gente sabe y acepta que Roberto Borge es culpable de millonarios fraudes. Incluso anoche Ciro Gómez Leyva en su noticiero hizo un recuento de los gobernadores bajo proceso y al referirse a Roberto Borge dijo, “El ex gobernador de Quintana Roo que en cualquier momento podría darse a la fuga”.

Carlos Joaquín ya está a 40 días de llegar a sus primeros 100 días de gobierno. En este punto los gobernadores acostumbran un gran despliegue publicitario para mostrarle al electorado sus avances y acciones. Si para ese día Roberto Borge no está en cárcel, o al menos en fuga, Carlos Joaquín empezará a resentir en serio el efecto Borge, pero ahora en su contra.
Publicar un comentario

Comentarios