Huelga en Tulum: hambre de cerrazón

Han transcurrido ya 12 días desde que 183 trabajadores del Ayuntamiento de Tulum iniciaron una huelga para que la Comuna les pague unos 7 y medio millones de pesos resultado de un laudo que falló a su favor por una serie de quejas que van desde despidos injustificados, reducciones de salarios y vejaciones laborales, sin que Edith Mendoza Pino, la alcaldesa, haya tenido la pericia para manejar y en su caso, resolver el problema, en tanto tres hombres y una mujer, dormían este Domingo al medio día en los bajos del Palacio Municipal por prescripción médica, pues son los últimos que han podido sobrevivir a una huelga de hambre que no logró sensibilizar a las autoridades.

Por: Esmaragdo Camaz

No hubo forma de hablar con ellos este medio día. Los cuatro están durmiendo. El médico les exigió que gastaran las menos energías posibles, aunque de todas formas, ya les quedan tan pocas que no necesitan prescripción médica, simplemente están ya muy agotados.

Originalmente fueron 13 los trabajadores que iniciaron la huelga de hambre para presionar, sensibilizar a la presidente municipal a que acate un ordenamiento claro, debe pagar indemnizaciones a 183 trabajadores que interpusieron demandas contra el Ayuntamiento por diversas razones.

Fue una demanda masiva que el sindicato promovió a favor de sus trabajadores en base a quejas como despidos masivos, disminución de salarios y asignación de labores distintas al cargo, todas estas irregularidades cometidas en este trienio, cuando la alcaldesa quiso deshacerse del personal que había trabajado con el alcalde anterior.

Pero en medio de esta disputa en la que los políticos dirimen sus diferencias y rencillas, están los trabajadores de la Comuna con verdaderas necesidades, quienes han tenido que dejar sus casas para emprender una huelga de hambre que no da resultado, pues hay hambre de cerrazón entre las autoridades municipales.

Una mujer se encuentra este domingo entre los huelguistas de hambre y su estado de salud, al igual que el de sus compañeros, es delicado. Se trata de Espina Gutiérrez Mesa, quien ha podido sobreponerse aún hoy, luego de una semana de ayuno.

Tres hombres la acompañan en la protesta. Secundino Canul Pib, Silvano Yan Pat y Marcelo Pat Chuc, todos ellos también trabajadores del Ayuntamiento de Tulum.

El campamento instalado en el Palacio Municipal está a la vista de los turistas y de los locales, quienes hoy, ya van mostrando simpatía con la causa de los huelguistas, pues muchos en Tulum ya permiten a los trabajadores del Ayuntamiento hacer pintas en sus vehículos para manifestarles su respaldo solidario.

Edith Mendoza falseó con la instalación de una mesa para el pago a los trabajadores, pues los poco que asistieron a ella, no son parte del grupo que reclama su indemnización.

“El Ayuntamiento quiso maquillar, porque los que fueron a cobrar no son del sindicato, Edith Mendoza quiso engañar, cierto que la mesa existe, pero no la aceptamos, puesto que nosotros no la propusimos”, dice Juan José Ortiz Mayo, otro de los manifestantes.

En tanto, la huelga empieza a causar estragos más allá de los manifestantes y de las partes que se entretienen en su disputa política, pues las afectaciones están llegando a la ciudadanía, lo cual además de grave, es un verdadero riesgo para aquellos que esperan mantenerse en sus cargos.

Los servicios púbicos, particularmente el servicio de recolección de basura, empiezan a mostrar los efectos del conflicto, en tanto en diversos puntos de la ciudad los desperdicios se van a cumulando.

Esta situación a su vez, está abriendo una vez más el debate sobre la cuestionada administración de Edith Mendoza y hoy parece que la oportunidad para emprender un juicio político en su contra se va abriendo paso.

Las condiciones para una declaración de ingobernabilidad están ya en un caldo de cultivo y Mendoza Pino, a fin de cuentas responsable de la administración Municipal, no logra resultados favorables, para sus trabajadores ni para la ciudadanía.