“Pueblicidio” en la Frontera Sur; advierten desaparición de la comunidad de “Subteniente López” ante funcionamiento del nuevo puente México-Belice
Por:
Expediente Quintana Roo
Publicado:
Chetumal.- El nuevo puente fronterizo
México-Belice, puesto en marcha apenas el pasado 15 de Mayo, sepultó la
paupérrima economía de la comunidad de Subteniente López y ahora cientos de
establecimientos y ambulantes están a punto de sucumbir, tanto que los pocos
habitantes del lugar han calificado esta situación como un “pueblicidio”, pues
este pueblo está a punto de desaparecer, advirtieron los afectados.
La
comunidad de Subteniente López se ha vuelto un pueblo fantasma, tras ser
abandonada desde hace muchos años por las instancias gubernamentales, al grado
que su economía se ha basado en el ambulantaje y el comercio semi organizado,
ante la falta de fuentes de empleo, expuso, Carlos Omar Zapata Cantú, delegado
sindical de la Untrac en esta zona.
Dijo
que hasta hace unos años les permitía a su población subsistir, ya que en esta
zona fronteriza no existe otra fuente de ingresos, sin embargo, con la apertura
del nuevo puente fronterizo México–Belice, que entró en funcionamiento el
pasado 15 de Mayo, la desgastada economía del lugar se desplomó drásticamente,
pues los visitantes de Centro América ahora eligen la nueva vía de acceso hacia
el país vecino.
“Es
un pueblo fantasma sin ningún servicio, los restaurantes están cerrados
esperando que pase un carro, en este momento se ha desplomado drásticamente la
economía del pueblo, que ahí vive la gente, la población en general está
afectada, lo que pasa es que Santa Elena en la historia del pueblo, nunca ha
recibido un apoyo para el progreso económico por parte del gobierno”.
Y
aún y cuando en esta localidad de Subteniente López, que se encuentra a cinco
minutos de la capital del estado y donde habitan alrededor de cinco mil
habitantes, ha permanecido olvidada por los tres órdenes de gobierno, pese a
que esta es la puerta de acceso al turismo proveniente de Belice y Centro América.
Por
su parte, Rosalba López, comerciante del ejido Santa Elena, manifestó que ante
la carencia de empresas locales y extranjeras, la población del lugar optó por
el autoempleo, creando una gama de servicios entre los que destacan, las fondas
de comida, el comercio ambulante y tiendas informales de ropa, mismos que
presentan serios problemas de supervivencia, al ya no haber turismo en el
lugar.
La
apertura del segundo puente ha facilitado el cruce de personas de México a
Belice y viceversa, sin embargo, las autoridades no previeron o hicieron caso
omiso a la afectación económica que está impactando a los pequeños comercios de
esta zona que dependen de su actividad para subsistir en este lugar donde no hay empleos.
“Ahorita
bajó mucho la venta, yo tengo dos empleadas que me ayudan y no hay para
pagarles, ahorita necesitamos realmente que las autoridades nos hagan caso,
porque en verdad esta pésimo esto, ahora
sí que es un pueblicidio lo que están haciendo con nosotros, porque ya no
tenemos entradas, las ventas han bajado demasiado, si antes vendía yo 500
pesos, ahora vendo 200 o 100 pesos, y no se vale, que se den cuenta las
autoridades lo que está pasando en subteniente López”.
Explicó
que los pocos ingresos sólo alcanzan para pagar la energía eléctrica, mientras
quienes pagan impuestos han optado por omitir los requerimientos de Hacienda
para poder subsistir.
La
situación es tan critica que las ventas se han desplomado en más del 80 por
ciento, viéndose afectados cerca de 250 establecimientos del lugar y un sin
número de ambulantes y comercios informales, lo que para la Cámara Nacional de
Comercio en la entidad podría representar el cierre de estas y por ende cientos
de personas desempleadas.
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