Ayuntamiento de Solidaridad no puede: Pide a PROFEPA "investigar" qué pasó en playa Punta Esmeralda



Playa del Carmen.- El ayuntamiento pidió la intervención de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) por el caso de corte ilegal de vegetación en la playa Punta Esmeralda, donde con antelación la Dirección de Infraestructura, Desarrollo Urbano, Medio Ambiente y Cambio Climático colocó un sello de clausura.

Hay que recordar que en ese tramo costero, inspectores detectaron el momento justo cuando un grupo de personas cortó,  con machetes, vegetación sembrada en la duna costera. Este tipo de flora sirve para la recuperación natural de la playa ante la erosión que registra en ese lugar y en otros puntos, el litoral solidarense. 



Según el oficio DGIDUMAyCC/339/2018, con fecha de recibido el 17 de abril de 2018 por la Profepa, el ayuntamiento pide a la dependencia federal para que actúe en este asunto, de acuerdo con las posibilidades de su competencia y basado en el artículo 189 de la Ley General de Equilibrio Ecológico y de Protección al Ambiente. 

Por esta actividad ilegal y con antelación, la dependencia colocó un sello de clausura, el cual significa una multa de aproximadamente tres mil pesos, según dio a conocer Doris Aké Sierra, directora general de Infraestructura, Desarrollo Urbano, Medio Ambiente y Cambio Climático.


En aquel jueves de la semana pasada, la citada Dirección recibió un  reporte alrededor de las 10 de la mañana cuando personal de la Dirección de Zona Federal Marítimo Terrestre detectó que unas personas estaban chapeando la duna costera, por lo cual al corroborar esta situación, colocaron un sello de clausura. 

Asimismo informó que las personas que perpetraron este menoscabo, al notar la presencia de la autoridad municipal se dieron a la fuga. A un lado donde sucedió este corte de especies vegetales, dos clubes de playa realizan actividades de explotación comercial con la renta de camastros, por lo que no se descarta que presumiblemente estén relacionados con este hecho. 


Las especies que resultaron afectadas son la uva de mar y la riñonina. A unos 50 metros de donde ocurrió esto, la Profepa colocó una manta de clausura en contra de cuatro estructuras de madera que desde el 2017 habían sido colocadas; estas ya contaban con suspensiones por parte de la Dirección de Desarrollo Urbano, según informó en su momento la municipalidad. 

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