Expedientes X: No hay candidatos…

Expedientes X 9 de Diciembre 2019.- No hay candidatos… Hay un problema en el proyecto para atajar la no deseable llegada de un eventual gobernador de Morena a Quintana Roo en el 2020. No hay candidatos visibles en el PAN. Tampoco en el PRD. En MC y en el PRI quizá sí. Y en los dos partidos locales de reciente creación tampoco hay. Morena tiene tres candidatos disponibles a la gubernatura ya conocidos de todos. Marybel Villegas, Mara Lezama y Luis Alegre. Estos tres ya con claros avances de una campaña anticipada. Se supone que el PAN debería repetir la próxima gubernatura. Carlos Joaquín dio el banderazo de salida ayer en Chetumal y pidió al panismo quintanarroense movilizarse. El problema es que el PAN no tiene hoy un personaje de peso para competir. Y el problema es todavía peor si los panistas esperan hasta los tiempos electorales del 2020 para lanzar un candidato, cuando los morenistas ya van hoy en caballo de hacienda. En 2016 la alianza PAN-PRD se dio el lujo de lanzar un candidato de última hora y ganó la gubernatura porque tenía en el PRI a un candidato fuerte, o sea, a Carlos Joaquín. ¿Repetirá el PAN esta estrategia para ganar en el 2020?...

Veamos qué posibles candidatos a gobernador de Quintana Roo están disponibles en el no-morenismo.

En Movimiento Ciudadano está el diputado en funciones José Luis “Chanito” Toledo. Harto conocido en todo Quintana Roo. Mediático hasta la médula. Se supone que “Chanito” tiene “casi” asegurado el voto en “Chanolandia” y colonias aledañas, todas éstas el rebaño de su padre, Marciano Toledo. Ya eso le daría al tal “Chanito” al menos una base para arrancar. Tiene el inconveniente de haber sido presentado al electorado originalmente como el hijo putativo de Roberto Borge. Otro “detalle” es que salió muy raspado con el panismo oficialista tras su fallido intento de ser candidato a presidente municipal de Benito Juárez. No parece muy viable que “Chanito” sea candidato del PAN a la gubernatura en 2020, aunque en política todo es posible.

En el PRI hay dos personajes probables para ser candidatos a gobernador en el 2020.

Uno es el diputado local Carlos Hernández Blanco. Fue presidente municipal de Cozumel y es muy apreciado en la isla. Ganó sin problemas las pasadas elecciones que lo tienen hoy en la Cámara de Diputados. Hizo mancuerna en las pasadas elecciones para la presidencia municipal en calidad de suplente y también ganó. Es de suponer que como eventual candidato a la gubernatura tendría segura una base electoral en su isla -que no es cosa menor- y seguramente también cacharía un buen de votos en Playa del Carmen, donde también tiene buena aceptación. Es decir que no arrancaría de cero. Sólo faltaría decidir si Carlos Hernández Blanco va por el PRI o por el PAN, o si en su caso surge una eventual mega-alianza TCM (Todos Contra Morena).

Y el otro es el presidente municipal de Cozumel, Pedro Joaquín Delbouis. Es sobrino del gobernador Carlos Joaquín e hijo del ex gobernador Pedro Joaquín Coldwell. Ganó la presidencia municipal sin problemas y todo indica que los cozumeleños le darían el voto para ser gobernador de Quintana Roo. Además de su desempeño como alcalde, posee el apellido de marca, lo que supone parte de su handicap. No obstante, algunos piensan que dos Joaquines seguidos en la gubernatura podría ser mal usado por la oposición, lo que en realidad tampoco es para tomarlo tan en cuenta viniendo justamente de los opositores. Las administraciones de los Joaquines han sido estables y en ningún caso han sido objeto de denuncias ni mucho menos. El único “detalle” con Pedro Joaquín es que él mismo ha promovido la versión de que no quiere ser gobernador. ¿Será? Si en caso que cambie de opinión, habrá que determinar por qué partido iría a la competencia electoral.

Y esos son todos. La otra opción para el proyecto Anti-Morena es empezar a fabricar un candidato ex profeso. Y eso habría que empezar a cocinarlo mañana mismo. Será un error a lamentar en el futuro si para cerrar el paso a Morena se piensa en un “tapado”, ya sea del PAN, PRI, PRD o cualquier otro partido, en vez de lanzarlo hoy mismo.