Cancún y Playa del Carmen paraíso de esteroides: Jesse James West desenmascara la venta irregular de anabólicos
En Cancún y Playa del Carmen, destinos turísticos venerados como joyas de la Riviera Maya, los esteroides anabólicos se venden con la misma facilidad que un refresco.
Cancún.- En un explosivo video de YouTube, el creador de contenido fitness Jesse James West expone una verdad incómoda, en Cancún y Playa del Carmen, destinos turísticos venerados como joyas de la Riviera Maya, los esteroides anabólicos se venden con la misma facilidad que un refresco. Su investigación no solo revela una alarmante cultura de consumo de fármacos para mejorar el rendimiento (PED) en gimnasios, farmacias y tiendas de suplementos, sino que también pone en la mira la vergonzosa inacción de los gobiernos municipales de Benito Juárez (Cancún) y Playa del Carmen, cuya negligencia permite que esta epidemia prospere, poniendo en riesgo la salud de locales, turistas y, más alarmante, adolescentes.
West arranca su investigación en Evolve Fitness Club, un gimnasio de Cancún donde el uso de esteroides es un secreto a voces. Entrevistas con culturistas locales revelan que hasta el 75% de ellos consumen PED, con casos de usuarios que comenzaron a los 18 años y reportes de adolescentes de apenas 13 años comprando estas sustancias. Esta normalización, alimentada por la facilidad de acceso en farmacias y tiendas de suplementos, es un reflejo directo de la falta de regulación. En Playa del Carmen, West, usando una cámara oculta, logró comprar esteroides en dos de tres tiendas visitadas, con precios tan bajos como 30 dólares. En una farmacia, adquirió HCG (gonadotropina coriónica humana), que resultó auténtico en una prueba de embarazo, pero la advertencia del Dr. Alex, un médico y entrenador local, es clara, la mayoría de estos productos, provenientes de laboratorios clandestinos alimentados por materia prima china, están contaminados y representan un peligro inminente.
La responsabilidad recae directamente en los gobiernos municipales de Cancún y Playa del Carmen, que han fallado estrepitosamente en controlar esta industria ilícita. Mientras estas ciudades se promocionan como paraísos turísticos, sus farmacias y tiendas operan como bazares de esteroides, explotando la laxitud regulatoria y la afluencia de turistas. El Dr. Alex confirmó que, aunque algunos PED son legales, la mayoría, como el HGH, son ilegales y circulan sin control, provenientes de laboratorios clandestinos en ciudades como Cancún, Playa del Carmen y otros centros urbanos. Esta permisividad no solo pone en riesgo la salud pública con productos potencialmente contaminados, sino que también fomenta una cultura que seduce a jóvenes con promesas de músculos rápidos, ignorando riesgos como daño hepático, problemas cardiovasculares y desequilibrios hormonales.
La Organización Mundial de la Salud ha advertido sobre la proliferación global de medicamentos falsificados, y Cancún y Playa del Carmen son un ejemplo flagrante de este problema. Los gobiernos de Benito Juárez y Playa del Carmen, obsesionados con las ganancias del turismo, han cerrado los ojos ante esta crisis, permitiendo que farmacias y tiendas operen sin escrutinio. Esta negligencia no solo mancha la reputación de estos destinos, sino que también expone a los jóvenes a un peligro evitable. Es hora de que las autoridades municipales dejen de priorizar el lucro turístico y asuman su responsabilidad, implementar regulaciones estrictas, clausurar puntos de venta ilícitos y educar a la población sobre los peligros de los PED. El video de West, visto por millones, es un llamado de atención que las alcaldesas de Cancún y Playa del Carmen no pueden ignorar. La pregunta es: ¿seguirán mirando hacia otro lado mientras su paraíso se convierte en un mercado negro de esteroides?