Caribe mexicano arranca verano 2025 con ocupación hotelera del 74.1%, superando el 70.3% de 2024
En 2025, la Sedetur proyecta la llegada de más de dos millones de turistas nacionales e internacionales durante toda la temporada, con una derrama económica superior a los dos mil millones de dólares.
Cancún.— Los principales destinos turísticos del Caribe mexicano iniciaron las vacaciones de verano de 2025 con una ocupación hotelera promedio del 74.1% en sus casi 136 mil cuartos disponibles, un aumento de 3.8 puntos porcentuales respecto al 70.3% registrado en la primera semana de julio de 2024, según la Secretaría de Turismo de Quintana Roo (Sedetur). Hasta el 25 de julio de 2025, cerca de 500 mil turistas visitaron la región, 29,237 más que los 470,763 reportados en el mismo período de 2024. Costa Mujeres lideró en 2025 con un 83.6%, seguida por Cancún con 76.3% y Puerto Morelos con 73.8%, mientras que en 2024 Cancún alcanzó un 80.6%, Riviera Maya un 74.7% e Isla Mujeres un 68.9%.
Desempeño por destino y proyecciones
En 2025, la Sedetur proyecta la llegada de más de dos millones de turistas nacionales e internacionales durante toda la temporada, con una derrama económica superior a los dos mil millones de dólares. En comparación, para el verano de 2024, se estimaba una afluencia similar, pero con una derrama económica proyectada de mil millones de dólares para períodos vacacionales clave como Semana Santa, lo que sugiere un crecimiento económico significativo para 2025. Los principales mercados emisores en 2025 son Estados Unidos, México, Canadá, Argentina, Reino Unido, Francia y Alemania, con un aumento notable en el turismo doméstico (35.5% del total en diciembre de 2024).
Infraestructura hotelera y rentas vacacionales
La oferta hotelera en 2025 incluye 1,478 hoteles y 135,916 habitaciones, con Playa del Carmen liderando (46,739 cuartos), seguida por Cancún (45,723) y Tulum (11,882). Esto representa un ligero incremento respecto a las 134 mil habitaciones reportadas en 2024. Además, en 2025 hay 23,409 rentas vacacionales activas, con 7,377 en Playa del Carmen, 6,220 en Cancún y 5,298 en Tulum, frente a las 23,538 registradas en 2024, mostrando una leve disminución en este segmento.
Conectividad aérea y seguridad
La conectividad aérea en 2025 abarca 100 ciudades de América y Europa, incluyendo dos países de Norteamérica, 12 de Latinoamérica y 11 de Europa, impulsada por el Aeropuerto Internacional de Tulum, que en el primer semestre de 2024 ya registró 0.5 millones de pasajeros. En 2024, la conectividad era robusta, con 38 vuelos desde Estados Unidos y 27 nacionales en diciembre, pero menos diversificada en destinos europeos.
El 18 de julio de 2025, la gobernadora Mara Lezama dio inicio al Operativo de Seguridad Vacacional de Verano, con más de siete mil elementos de seguridad desplegados, igualando el esfuerzo de 2024 pero con una proyección más ambiciosa de dos millones de visitantes y una derrama económica de dos mil millones de dólares.
Perspectivas y retos
El verano de 2025 se beneficia de una mayor promoción internacional, como la participación en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) 2025, con expectativas de ocupaciones superiores al 90%, según la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres. En 2024, la ocupación de Semana Santa alcanzó un 79.3%, por debajo del 82% esperado, lo que resalta el potencial de mejora en 2025. Sin embargo, en 2024, la Coparmex Quintana Roo señaló riesgos por una posible desaceleración económica nacional, que podría impactar el turismo doméstico debido a la pérdida de empleos formales. Este desafío parece parcialmente mitigado en 2025 con un aumento en la afluencia de turistas nacionales.
Conclusión
El Caribe mexicano en verano de 2025 supera el desempeño de 2024, con una ocupación hotelera del 74.1% frente al 70.3% y un incremento en llegadas de turistas (500,000 vs. 470,763). La proyección de una derrama económica de dos mil millones de dólares refleja un crecimiento significativo respecto a 2024. La infraestructura hotelera, la conectividad aérea y las estrategias de seguridad y promoción consolidan al Caribe mexicano como un destino líder, aunque los retos económicos nacionales podrían influir en el turismo doméstico.