Cozumel, dividido por el cuarto muelle: unos marchan a favor, otros en contra
Las autoridades estatales y municipales, aunque no otorgaron los permisos, tienen un rol crucial.
Cozumel.— Esta tarde, Cozumel vivió una jornada de contrastes con dos marchas que reflejaron la polarización en torno al proyecto del cuarto muelle para cruceros: una, liderada por sindicatos como el de taxistas y la CTM, defendió la obra como clave para el desarrollo económico; la otra, con personas de la sociedad civil en la zona de Mantarrayas, expresó su oposición por los riesgos ambientales y sociales. Estas manifestaciones dejaron clara la división en la isla frente a una obra que despierta tanto esperanzas como temores.
La marcha a favor, notablemente concurrida, mostró una organización que evocó las clásicas movilizaciones corporativas. Sin embargo, surge la pregunta: si el proyecto ya cuenta con todos los permisos federales, estatales y municipales, ¿por qué la necesidad de demostrar fuerza en las calles? ¿Es un intento por consolidar apoyo social?
En contraste, la protesta en contra no careció de relevancia. Los opositores argumentan que el muelle pone en peligro una zona arrecifal de alto valor ecológico y uno de los pocos espacios recreativos accesibles para los cozumeleños. Cuestionan si vale la pena dañar el ecosistema por cruceros más grandes, cuando los muelles actuales no están al límite de su capacidad.
Quienes apoyan el proyecto sostienen que el turismo, pilar económico de Cozumel, exige infraestructura moderna para recibir cruceros de mayor tamaño. Aunque la legalidad de la obra está respaldada, su legitimidad social sigue en entredicho, generando un debate que no admite respuestas simples.
Las autoridades estatales y municipales, aunque no otorgaron los permisos, tienen un rol crucial. La ciudadanía espera de ellas liderazgo, claridad y una postura definida ante un proyecto que definirá el futuro de la isla. Sin un diálogo genuino, la brecha entre los sectores podría agravarse. Cozumel necesita puentes de entendimiento, no muros de división.