Desmantelan red de explotación sexual en Cancún: Una detenida y ocho mujeres rescatadas
Seis mexicanas y dos cubanas víctimas de explotación sexual en un bar ubicado en la avenida Tulum y Circuito Chacá, Supermanzana 24, en el corazón de Cancún.
Cancún.- En un golpe contra la trata de personas, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo, junto con la Guardia Nacional, rescató a ocho mujeres –seis mexicanas y dos cubanas– víctimas de explotación sexual en un bar ubicado en la avenida Tulum y Circuito Chacá, Supermanzana 24, en el corazón de Cancún. El operativo, ejecutado tras una orden de cateo, culminó con la detención de Beatriz “N”, presunta administradora del establecimiento, y la clausura del lugar.
Las autoridades descubrieron un esquema de explotación que combinaba coerción y violencia psicológica. Las mujeres, obligadas a “fichar” –vender copas a 200 pesos– y a ofrecer servicios sexuales por 2,000 pesos, enfrentaban amenazas de castigos, como jornadas laborales extenuantes, si se resistían. Además, se les cobraba una cuota adicional de 2,000 pesos por salir del local, una práctica que evidencia el control y la explotación sistemática ejercida sobre ellas. Durante el cateo, se decomisaron un teléfono celular, dinero en efectivo y preservativos, pruebas que ahora están bajo análisis del Ministerio Público.
Este caso expone una vez más la vulnerabilidad de Cancún como epicentro turístico, donde la trata de personas se camufla bajo la fachada de bares y centros nocturnos. Según la Organización Internacional del Trabajo, México registra más de 400,000 víctimas de explotación sexual, muchas de ellas en destinos turísticos como este. La presencia de mujeres extranjeras entre las víctimas resalta la dimensión transnacional de estas redes, que aprovechan la precariedad económica y la falta de regulación efectiva.
Si bien el rescate y la detención son un avance, el caso plantea preguntas incómodas: ¿cómo operó este establecimiento durante tanto tiempo sin ser detectado? ¿Qué fallos en la vigilancia local permitieron que estas prácticas prosperaran en una zona tan concurrida? La FGE ha prometido atención integral a las víctimas y una investigación a fondo, pero la efectividad de estas medidas dependerá de un seguimiento riguroso y de políticas preventivas que ataquen las raíces de la trata.
Beatriz “N” espera la definición de su situación jurídica, mientras las mujeres rescatadas reciben apoyo en las instalaciones de la FGE. La Fiscalía exhortó a la ciudadanía a denunciar, pero queda claro que combatir este delito requiere más que operativos aislados, urge una estrategia integral que combine inteligencia policial, cooperación internacional y protección efectiva para las víctimas. Cancún, un paraíso para muchos, sigue siendo una pesadilla para quienes caen en las redes de la explotación.