Dicen que van a ordenar el comercio ambulante de la Quinta Avenida de PDC; les van a poner un tarjetón QR
El plan incluye a quienes operan con permisos provisionales o de manera irregular.
Playa del Carmen.— El director de fiscalización de Playa del Carmen, Julián Lara, anunció un nuevo intento de regular el comercio ambulante en el municipio, con la promesa de implementarlo en un plazo de 15 días. La medida estrella es un tarjetón con código QR para identificar a los comerciantes, su actividad y ubicación, supuestamente para ordenar el caos en espacios como la Quinta Avenida y reducir la saturación. Sin embargo, la propuesta despierta dudas sobre su viabilidad y efectividad, considerando la histórica resistencia de las autoridades a controlar el comercio informal.
Según Lara, se notificará a los más de 100 comerciantes ambulantes activos para que presenten expedientes físicos y digitales, los cuales serán evaluados por una comisión antes de autorizar su operación. La narrativa oficial habla de “transparencia” y “control” en el padrón municipal, pero no se aclara cómo se garantizará que este proceso no termine en un trámite burocrático más, engorroso para los vendedores y propenso a irregularidades.
Además, el plan incluye a quienes operan con permisos provisionales o de manera irregular, lo que plantea preguntas sobre si realmente se busca formalizar o simplemente formalizar un control más estricto que podría beneficiar a ciertos intereses.
Con 14,000 negocios establecidos en el municipio, los 100 comerciantes ambulantes parecen un problema menor, pero el enfoque en ellos sugiere una prioridad en la imagen turística, especialmente en la zona de la Quinta Avenida, donde arrancará el programa antes de extenderse a otras áreas.
Aunque el discurso oficial promete un desarrollo urbano “más equilibrado” y responder a las demandas ciudadanas, no se mencionan medidas concretas para apoyar a los comerciantes en el proceso ni garantías de que no serán desplazados por grandes negocios o intereses comerciales. La falta de detalles sobre los requisitos y el funcionamiento de la comisión evaluadora refuerza el escepticismo sobre si este plan será una solución real o solo un parche más en la gestión del comercio informal.


