Quieren detalles de "Puerta al Mar" de Sedena en FCP, tras desconfianza de habitantes en el Ejército por restricciones en "Parque del Jaguar" de Tulum
Las declaraciones de Gutiérrez surgen en un contexto de profunda desconfianza comunitaria hacia la gestión militar.
Chetumal.— La diputada Tepi Gutiérrez, presidenta de la Comisión de Turismo y Asuntos Internacionales del Congreso local de Quintana Roo, se pronunció por conocer más detalles del proyecto “Puerta al Mar” en Felipe Carrillo Puerto, bajo la administración de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), tras las manifestaciones y bloqueos del pasado reciente de ejidatarios y habitantes que cuestionan el proyecto ya que temen se convierta en un caso similar al Parque del Jaguar en Tulum, donde la administración del Ejército prohibió el libre acceso a las playas, produciendo un impacto negativo en el turismo.
Gutiérrez planteó su intención de dialogar directamente con la presidenta municipal Mari Carmen Hernández Solís para revisar los lineamientos operativos y evitar que el centro ecoturístico —un camino de 55 km hacia Vigía Chico en la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an— repita los errores de exclusión vistos en Tulum.
“Esta información, sin duda, buscaré un acercamiento con la presidenta de Carrillo Puerto para conocer un poco más de cuáles son los lineamientos que se van a considerar. Y yo creo que lo que es muy rescatable y aplaudible es que ya exista este espacio, esta ventana al mar. Sí, sin duda. Yo creo que aquí ya se dio el primer paso, que exista esta área para que puedan los pobladores disfrutar de esta zona, conocer esta zona, porque hay muchos que no conocen el mar, por su ubicación geográfica”, declaró la legisladora.
Las declaraciones de Gutiérrez surgen en un contexto de profunda desconfianza comunitaria hacia la gestión militar, impulsada por bloqueos históricos que paralizaron las obras y expusieron la ineficacia de Sedena en proyectos civiles. Ejidatarios del núcleo Felipe Carrillo Puerto, respaldados por más de 250 familias indígenas, han liderado protestas reactivas desde el arranque de la obra el 30 de agosto de 2023, temiendo despojos territoriales y daños ambientales en una zona Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1987.
Bloqueos y Conflictos Pasados: La Voz de los Pobladores
Abril 2024: Un bloqueo de dos horas en la diagonal 63 detuvo maquinaria por incumplimiento en la compra de material pétreo local, acordado en asamblea ejidal a cambio del comodato de 22 km de tierra. “Estamos defendiendo nuestro patrimonio agrario”, afirmaron líderes como Edilberto Chan Beh, afectando a cientos de trabajadores y evidenciando fallas logísticas de Sedena.
Noviembre 2024 - Enero 2025: El clímax llegó con un bloqueo de 68 días (del 4 de noviembre al 16 de enero), iniciado por la invasión militar al predio Expo Maya –6 hectáreas donadas para ferias culturales y reclamadas por Sedena para viviendas de sus elementos–. Ejidatarios como Demetrio Chan Be denunciaron presencia armada con metralletas: “No tuvimos miedo porque lo que estamos peleando es nuestro”. La tensión se resolvió solo tras intervención de la gobernadora Mara Lezama y Hernández Solís, con promesas de un mercado ejidal y domo cultural que, hasta octubre de 2025, permanecen sin ejecutarse.
Estos episodios, que retrasaron el avance al 47% en julio de 2024 (22 km pavimentados, resto como vía artesanal), resaltan la inoperancia de Sedena: inició obras sin Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) aprobada por Semarnat –presentada hasta el 18 de diciembre de 2024–, violando normativas y generando amparos indígenas. La consulta pública de Semarnat (8 de septiembre al 7 de octubre de 2025) y una reunión informativa el 15 de octubre recibieron demandas para negar permisos, con críticas de langosteros y ambientalistas por riesgos a manglares y especies endémicas.
Paralelismos con el Parque del Jaguar: El Fracaso Militar en Turismo
El temor comunitario se ancla en el Parque del Jaguar de Tulum, otro proyecto bajo Sedena, donde la prohibición de libre acceso a playas –con cobros de hasta 415 pesos para extranjeros más 100 pesos por zona arqueológica– causó una caída del 20-30% en visitas en octubre de 2025, desviando turistas a Cancún y Playa del Carmen. Habitantes mayas y guías locales denuncian exclusión económica, convirtiendo un espacio público en un enclave privatizado. “Si Sedena administra ‘Puerta al Mar’ con restaurantes, muelle y playa artificial, repetirá el despojo: playas para elites, no para mayas”, advierten ejidatarios, evocando despojos históricos del porfiriato.
Pobladores insisten en consulta previa y cumplimiento de la Ley Agraria, priorizando turismo comunitario sobre megaproyectos. Mientras Sedena litiga por Expo Maya y defiende su rol, las declaraciones de Gutiérrez podrían catalizar diálogos, pero la historia reciente cuestiona si el Ejército, forzado a tareas turísticas, priorizará a las comunidades o perpetuará la ineficacia. El proyecto pende de resoluciones ambientales y agrarias, con ejidatarios listos para nuevas acciones si no hay inclusión real.