Expedientes X: AMLO, la Libertad de Expresión y la División del País


Expedientes X 7 de Junio 2020.- AMLO, la Libertad de Expresión y la División del País… A propósito del “Día de la Libertad de Expresión”, este es un buen momento para evidenciar el cerco que el presidente de México -Andrés Manuel López Obrador- le cerró a las libertades de los mexicanos para expresarse. Ahora más que nunca, AMLO dividió al país. Ayer mandó un ultimátum. Pronunció el clásico “estás conmigo o en mi contra”. Dijo que cualquiera que esté en su contra, está en contra de la transformación de México. ¿De qué transformación habla AMLO? ¿De la transformación de un país corrupto a uno más corrupto? Con AMLO México es más corrupto que antes de acuerdo a recientes datos del INEGI. Él, AMLO, es ahora el jefe de la mafia del poder que tanto criticó en el pasado. Sus aliados son políticos de dudosa probidad. Muchos de ellos procedentes del PRI, de donde él mismo procede. Y otros son personajes que forman parte de su estructura de poder desde tiempo atrás. ¿Cuál es la “gran” transformación con la que AMLO amenaza a los mexicanos que se oponen a ella? Este texto es un vistazo rápido a la mafia del poder que encabeza López Obrador...

Su secretario de Educación, Esteban Moctezuma, es priista. Éste fue el secretario de Gobernación y de Desarrollo Social del entonces presidente priista Ernesto Zedillo. Y cuando ese sexenio acabó, lo colocaron al frente de “Fundación Azteca”, de Ricardo Salinas Pliego. Y de ahí al gabinete de AMLO.

Otro político priista consumado multi-acusado de corrupción es Manuel Bartlett, el consentido del presidente López Obrador. Hoy es el director de la Comisión Federal de Electricidad. Fue el secretario de Gobernación en el sexenio del presidente priista Miguel de la Madrid Hurtado. Bartlett fue el encargado de ejecutar el fraude electoral de 1988 contra Cuauhtémoc Cárdenas, en ese entonces candidato presidencial por el PRD. De todos es conocido que a Bartlett “se le cayó el sistema”. Fue secretario de Educación Pública del ex presidente también priista Carlos Salinas de Gortari. Y de ahí salió a su natal Puebla donde el priismo lo hizo gobernador de ese estado.

El méxico-canadiense Napoleón Gómez Urrutia. Ex líder del sindicato minero, salió huyendo en 2013 a Canadá. La Interpol lo buscaba por una denuncia de un millonario fraude de 55 MDD contra los trabajadores mineros. En 2018 reapareció en México, esta vez arropado por AMLO, quien lo llevó al Senado. López Obrador y su mafia del poder hicieron lo necesario para vestirlo como senador aún cuando Gómez Urrutia se ostenta con pasaporte canadiense.

René Bejarano -el señor de la ligas- y su esposa Dolores Padierna. El primero era el líder de la bancada perredista en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y operador político de Andrés Manuel López Obrador, en ese entonces el jefe de gobierno de la Ciudad de México. Bejarano fue exhibido en cadena nacional en ese 2004 embolsándose millones de pesos producto de la corrupción. Hoy Dolores Padierna -esposa de René Bejarano- es diputada federal por Morena y una de las operadores políticas de AMLO.

Y uno de los más recientes nombres que aparecen en la pirámide de corrupción de López Obrador es el ex banquero tabasqueño Carlos Cabal Peniche. En 1998 este personaje fue detenido en Australia acusado de lavado de dinero y de operaciones con recursos de procedencia ilícita. En Diciembre 2019 declaró haber financiado con 25 millones de dólares las campañas del PRI de 1994 de Luis Donaldo Colosio, Ernesto Zedillo y Carlos Madrazo, éste último para la gubernatura de Tabasco. Hoy Cabal Peniche es el operador financiero de AMLO. Es asesor, creador y operador del “Banco del Bienestar”, éste el ente que maneja a discreción millones de pesos del erario público, o sea, dinero de los mexicanos.

Esa es la transformación de AMLO a la que millones de mexicanos se oponen.

Con AMLO la economía no crece. No crecerá en el futuro mediato. Ni siquiera un punto. La pérdida de empleos se cuenta por millones. Casi 11 millones de mexicanos perdieron su trabajo durante los primeros 18 meses de gobierno de López Obrador. Ahora los mexicanos tienen menos que antes y su camino a la pobreza es inminente.

Esa es la transformación de AMLO a la que también millones de mexicanos se oponen.

AMLO ataca a la prensa permanentemente. Insulta. Acusa. Denosta. E incita a la violencia contra medios y periodistas. Nuca en la historia del México reciente los periodistas habían sido tan acosados por un presidente. Hay intimidación. La más reciente es la de ayer. “Estás conmigo o en mi contra” es la respuesta de AMLO al periodista e historiador Enrique Krauze, quien se atrevió a opinar sobre la valiente postura del gobernador de Jalisco, quien acusó que hay personajes del gobierno de AMLO detrás de las violentas manifestaciones registradas en Guadalajara la semana pasada.

Esa es la transformación de AMLO que amedrenta a la prensa. Mancilla la libertad de expresión.

Andrés Manuel López Obrador divide al país. Lo hace todo el tiempo. Agrede, insulta a los empresarios. También arremete contra políticos, ex presidentes, madres de familia, manifestantes en general. Arremete contra víctimas del delito, como los Le Baron, por ejemplo. Pero también ataca y desacredita a mujeres violentadas. AMLO dice que las llamadas del 911 de violencia contra las mujeres son falsas. El presidente denosta, ignora y se molesta con los padres de niños con cáncer, que le reclaman insistentemente la carencia de medicinas en hospitales públicos. Y el presidente también ataca a los médicos y enfermeras, aún cuando arriesgan sus vidas en medio de la pandemia. AMLO llama mercantilistas a los profesionales de la Salud.

Ya murieron miles de mexicanos por COVID-19. El presidente -que se niega a ponerse el cubre boca- tiró la pandemia a la chacota. Bromeó, se burló y no actuó con responsabilidad y con oportunidad. México y su presidente tuvieron mucho tiempo para actuar en contra del virus. Pero AMLO no lo hizo.

Y millones de pesos que podrían ayudar a salvar más vidas, AMLO los usa para sus proyectos faraónicos innecesarios, como el Tren Maya, éste un capricho. López Obrador sueña con tener un tren que pase cerca de su finca en Palenque, Chiapas. Y así es como lo está haciendo.

López Obrador prometió no endeudar más a México. Pero hoy se supo que el Banco Mundial acaba de autorizarle a México un maga préstamo de mil millones de dólares para enfrentar la pandemia por COVID-19. Una más de las mentiras del presidente.

El presidente López Obrador y su transformación tiene dividido al país. AMLO ya le dio un duro golpe a la libertad de expresión. Ya no quiere más críticas. Exige sometimiento total. No quiere que nadie piense ni se expresa diferente a él.
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